Einstein
creía que es un milagro que el mundo sea comprensible y que Dios no
juega a los dados. ¿Cómo es posible que un sistema aleatorio pueda
acabar organizando la vida? Si el movimiento de las partículas
elementales responde al azar ¿Dónde empieza el orden que gobierna
la mente para discernir el milagro de la racionalidad? La respuesta
es compleja y hay que buscarla en la complejidad. Atractor es el
estado al que fluye una serie numérica que expresa la evolución de
un sistema (es algo que obliga a algo a hacer algo). El ejemplo más
sencillo puede ser el péndulo simple llevado por rozamiento a la
posición de ángulo nulo respecto a la vertical. Otro más
complicado sería la confluencia de una población dispersa, como
puede ser la afición, atraída a la Rosaleda cuando el Málaga juega
en casa. O el desorden posterior, impulsado en este caso por un
atractor extraño, cuando cada uno de los asistentes que han
permanecido juntos en las gradas, una vez terminado el partido,
emprenden caminos tan dispares entre sí que representan el
movimiento caótico.
Los
matemáticos hablan de comportamiento caótico cuando trayectorias
que salen del espacio de fases desde puntos tan próximos como se
quiera se alejan unas de otras de forma exponencial. La idea surgió
cuando Lorenz buscaba fórmulas con las que predecir el cambio
atmosférico con la máxima antelación posible utilizando ecuaciones
diferenciales que como se sabe se complican al aumentar el número de
variables. Lorenz intentaba predecir el tiempo manejando solo la
temperatura cuando se topó con el caos. Debido a la alteración
mínima de una cifra introducida en los ordenadores los resultados se
alejaban tanto unos de otros y de lo esperado que para explicarlo se
le ocurrió aquello del efecto mariposa.
Las
ecuaciones que describen el caos se han aplicado al estudio de
procesos complejos en todos los campos de la ciencia. Los neurólogos
las han utilizado para interpretar gráficas de electroencefalograma
de individuos durante el sueño, la vigilia y en medio de un ataque
epiléptico. El análisis de estas curvas ha revelado que el sueño
expresa un estado caótico, que la vigilia resulta intratable por su
diversidad y que el ataque epiléptico responde a un patrón súper
fisiológico donde una sola función toma el control del sistema. En
general, la enfermedad es un atractor rígido que impide la
intervención del resto de las funciones llevando al sujeto al
equilibrio de la muerte.
Esto
laxos conceptos físicos podrían servir para descifrar el
comportamiento de algunos políticos que complican todo lo que pueden
la convivencia ajenos por completo el milagro del entendimiento que
asombraba a Einstein. Sin necesidad de electro se aprecia que hay
quien compatibiliza, contradiciendo a la ciencia, el caos delirante
del sueño con conductas monolíticas autoritarias típicas del brote
epiléptico y que la duda metódica de quien analiza la realidad con
lucidez no merece el respeto de casi nadie. Como queda claro el
propósito recreativo de este discurso, los enunciados físicos deben
ser tomados con relajación.
CIRANO
La complejidad de la vidaMatemática del caos
Matemática y vida
Política y caos
¿Cómo es posible que un sistema aleatorio pueda acabar organizando la vida?
Si el movimiento de las partículas elementales responde al azar ¿Dónde empieza el orden que gobierna la mente para discernir el milagro de la racionalidad? La respuesta es compleja y hay que buscarla en la complejidad.
Los matemáticos hablan de comportamiento caótico cuando trayectorias que salen del espacio de fases desde puntos tan próximos como se quiera se alejan unas de otras de forma exponencial.
Las ecuaciones que describen el caos se han aplicado al estudio de procesos complejos en todos los campos de la ciencia.
Atractor es el estado al que fluye una serie numérica que expresa la evolución de un sistema.
*Hacia un punto convergente.
*Divergencia desde un punto al exterior.
Los neurólogos han utilizado las ecuaciones que describen el caos para interpretar gráficas de electroencefalograma de individuos durante el sueño, la vigilia y en medio de un ataque epiléptico.
El análisis de estas curvas ha revelado que:
*el sueño expresa un estado caótico,
*la vigilia resulta intratable por su diversidad y
*el ataque epiléptico responde a un patrón súper fisiológico donde una sola función toma el control del sistema.
En general, la enfermedad es un atractor rígido que impide la intervención del resto de las funciones llevando al sujeto al equilibrio de la muerte.
Sin necesidad de electro se aprecia que hay quienes compatibilizan, contradiciendo a la ciencia, el caos delirante del sueño con conductas monolíticas autoritarias típicas del brote epiléptico y que la duda metódica de quien analiza la realidad con lucidez no merece el respeto de casi nadie.
Pienso que hay tres áreas en el mensaje de Cirano: Cosmológica, matemática y humanista.
En cosmología solo basta contemplar el grado de desarrollo de la vida en el planeta Tierra partiendo del magma primigenio. La optimización de recursos que proporcionaba el medio y la asociación simbiótica de los átomos, moléculas y tejidos nos trajo hasta aquí. La lectura de “Termodinamica de la vida”, de Eric D. Schneider y “Microcosmos”, de Lynn Margulis, me ayuda a entender esto. Falta dilucidar qué papel juega la mecánica cuántica en todos los procesos, preocupación actual de Cirano.
La aplicación de la matemática al conocimiento y manejo del caos (en este caso como en otros como en sociología, economía, etc.) es una herramienta que permite diseccionar realidades para la toma de decisiones.
En la política española el éxito del cosmos mediante el uso de estrategias sinérgicas para el desarrollo de la vida en un medio hostil está en las antípodas de la situación actual donde, como bien dice Cirano, se maneja bajo el síndrome del epiléptico. Pero el cosmos ha demostrado su capacidad de organización por encima de los ambientes hostiles y a la larga quien no se adapte al medio será engullido por los componentes con más capacidad de entendimiento. Quien no tenga capacidad sinérgica de adaptación desaparecerá, ya sea un partido o toda la especie animal que se descuelgue del flujo del cosmos. CIRANO (COMENTARIO )
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