ASUMIR




Estoy convencido de al menos un hecho de eutrapelia, porque los andaluces tienen un sentimiento de sabiduría cuando llegan las elecciones. Siempre, aunque por desgracia no han sido en muchas ocasiones, que han generado un nuevo mapa político han acertado plenamente. Posiblemente porque tiene sobre sus espaldas una historia cargada de una enorme e intensa actividad de intereses y culturas que le hacen ser, sabía.
¿Se romperá este habitual comportamiento en las próximas? Mi duda viene generada por la enorme confusión ideológica que se vive en estos momentos, una izquierda que no genera confianza y unos conservadores sometiendo al país a una espiral de reformas en la mayor de las veces demasiado interesadas en defender poderes históricos.
Creo que no es el camino, y además demasiado manido, las descalificaciones y las trampas políticas que constante y habitualmente salen a la luz para generar escándalo y aburrimiento en los ciudadanos. Desearía que se respetaran las reglas de juego, y que la limpieza de corrupción sea algo en exclusiva de los mecanismos públicos que con tanta profusión disponemos.
En cuanto a las herramientas que los partidos progresistas, al menos los que a mí me interesan, usan para acercarse a los ciudadanos, se deberían regenerar en casi todos los aspectos. Cambiar ese lenguaje simplón y lleno de tópicos, que parece dirigido a la mediocridad y ausente de cualquier aspecto de reflexión. Abandonar la constante referencia a la culpabilidad, y a las referencias del diferir, que producen hastió y desconfianza a los ciudadanos. Y realizar selección de actos públicos, donde se acompañe elementos de alegría colectiva con otros específicos de gremios o de barrios con asuntos y problemas concretos que interesen por su mayor contenido a los ciudadanos.
Por último llamar a la participación colectiva a todos los andaluces, debemos asumir que solo en el medio que elegimos, el parlamento, debemos limar nuestras diferencias y poder construir un mundo mejor del que hasta ahora hemos creado.



INDALESIO         Marzo 2012





3 comentarios:

  1. Sr. Indalesio: Estoy básicamente de acuerdo con su artículo, aunque hay algunas matizaciones que debo hacer y que pueden ser interesantes reflexiones para el día 25, fecha crucial para el futuro de nuestra Andalucía. En primer lugar cambiar el sentido del deber de votar por la obligación moral de hacerlo. Esto de por si, tengo la impresión que fortalece la democracia y sobre todo a la izquierda, que nos ha caracterizado históricamente por romper su organización en los momentos de disparidad de criterios y no concluir hasta la saciedad la discusión que haga agrupar las ideas. No tenemos en cuenta que nadie está en posesión de la verdad y menos aún en la actuación política, puesto que la unión es la que fortalece sus ideas cara a la parte contraria, reorganizadas bajo la batuta del ultra neoliberalismo.
    En mi modesta opinión, pase lo que pase en estas elecciones, esperemos que n o ganen loz azules, es urgentew y necesario que se inicie un intercambio de ideas y de como configurar la praxis política de la izquierda, donde además caben otras prácticas no esencialmente políticas puras en sus definiciones, pero sí de una participación necesaria en esta nueva sociedad que tenemos que crear entre todos y no como Vd. dice al final de su reflexión, "que hemos creado" yo diría : NOS HAN CREADO .
    Votar, sólo votar, no es crear, sólo es participar en una parte muy pequeña de un gran engranaje que es la máquina de la vida política´Salú (así es como decimos "salud" los andaluces, estimado amigo Indalesio MARUBEN

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  2. Ingenuo Indalesio, aún crees que se puede actuar con sensatez en esta país. Llevamos la pesada carga de la ignorancia y de la ignavia, y ese comportamiento ignaro solo produce desafueros, aunque alguna vez exista algún acierto. Para conseguir sabiduría se tiene que trabajar y comprometer día a día, solo así se llegara a discernir lo correcto de lo zafio.

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    1. Pues la ignavia y la ignorancia no son privativas de este país. Están ampliamente difundidas por el globo, así que no me parece elemento causal suficiente. Debe haber algo más.Quizá tradición...quizá prepotencia...quiza yo que sé.Puede que el secreto esté en la cultura taurófila. Siempre la lucha contra el mito.Y parece que hoy el mito(el toro)es el capitalismo, el neoliberalismo, los empresarios,el socialismo,el comunismo etc.Y esto solo puede tener un final....mortal claro está.De uno o de otro. Se utilizan grandes palabras en la"lucha": Opresion, represión, aniquilamiento, derrota, victoria.... Cuanto mejor sería decir trabajo, construcción, colaboracion, tolerancia, participación, reconocimiento. Salud

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