Decidió amar a la mujer de la voz ronca. La conoció en las aulas de la Universidad de Turín, su especialidad eran las Matemáticas, y aunque ajeno a sus intereses del conocimiento, perdió la cabeza por ella.
También sé que se llamaba Tina, y el engaño fue su interés por Altiero Spinelli, responsable político del PCI en Turín. Cuando se enteró, aguanto todo lo que pudo, hasta que por su causa fue detenido y condenado a la perdida de libertad.
Sufrió mucho con esa y otras mujeres, como muchos de los hombres del mundo de la literatura, y siempre se sintió solo, inmensamente solo.
Un día hizo una pequeña maleta de cuero, regalo de su última amiga Constance Dowling, metió alguna ropa, su cuaderno de notas, también sus poemas preferidos “Diálogos con Leucó” y hojas de papel en un fólder. Se despidió de su hermana con quien vivía y salió para realizar un viaje. Cuando llega a la estación en la piazza Carlo Felice, mira en derredor y descubre un pequeño Hotel, Albergo Roma. Decide tomar una habitación, en especial la 346 con teléfono, allí pasa varias horas y realiza diversas llamadas telefónicas que son improductivas.
Saca su cuaderno y lee su última anotación, “Todo esto da asco. Basta de palabras. Un gesto. No escribiré más”.
Hace un último intento para conseguir convencer a Constance que cene con él, pero no consigue convencerla, y además le amenaza. Cuelga el teléfono y se desabrocha la camisa y corbata, de nuevo abre la maleta y saca unos botes de barbitúricos, más de diez y los pone en su mesilla de noche. Anota en la primera pagina en blanco de los Diálogos con Leucó, “Perdono a todos y a todos pido perdón. No murmuren demasiado” Después con un vaso de agua, toma el contenido de los frascos de somníferos. Era sábado, un 26 de agosto de 1950.
Había leído y conocía la literatura de Cesare Pavese, pero conseguí su último libro “La luna y las Hogueras” y su embrujo lo convirtió en uno de mis preferidos. Esa prosa poética me convenció en dar a mi vida literaria un ritmo pausado y lleno de admirables notas melódicas y cargadas de fortaleza.
Es un relato simbólico y descaradamente lúcido, poético en sus planteamientos y magistral en su resolución, cargado de una fuerza irresistible que nos conduce desde su primera página al centro del laberinto del novelista piamontés, la triple imposibilidad: de regresar la origen, de descubrir nuestro autentico nombre y de encontrar un lugar en el mundo.
La novela vivida en los campos del Piamonte natal, se desarrolla entre la actualidad y la memoria de la adultez y la infancia, descubriendo sus orígenes y despidiéndose de sus recuerdos en las hogueras de los ciclos lunares. La sencillez y la candidez de sus palabras, concluye con los sentimientos del conocimiento y de la madurez, “sin buscarlos fuera, sino en ritmo de su vida intima”
Resulta difícil de entender que un hombre atormentado por su vida, consiguiera escribir esas palabras tan sobrecogedoras y tan importante para el mundo de la literatura.
INDALESIO MAYO DEL 2011
Me gustaría indalesio/ lectores, que nos dieras tu/ vuestra opinión a cerca de la idea que el autor que has elegido sabes que es considerado en algunos ámbitos como misógino. Los personajes femeninos siempre responden a dos patrones: Uno el de la mujer sumisa, débil, cariñosa que él detesta y la mujer dura, autosuficiente que él admira. Además de multitud de ejemplos donde el autor pone muy de manifiesto frases literal y claramente misóginas, considera que la mayoría de las mujeres por ejemplo son prostitutas. Pero, a pesar de lo anterior yo me pregunto si realmente es un ser carente de afecto, que pasa su vida buscando ser correspondido y que finalmente esa idea misógina no es más que una pura rabieta en realidad. Me gustaría nos dijeras....
ResponderEliminarCreo que el término rabieta, si le adjuntamos permanente crónica, explica esa búsqueda incesante de el amor total, idealizado, la fusion con el objeto amado, que el destino aleja y acerca, incesantemente,sin poder ser vivido de forma duradera y por tanto la desesperacion. Si ademas de esa existencia, rosario de expectativas y decepciones sin fin, las circunstancias externas caen en tromba una y otra vez y con esa sensibilidad abandonica es humanamente imposible sustraerse a la melancolia profunda en la esfera de los sentimientos y al pensamiento dicotòmico o madre o prostituta en cuanto a las mujeres se refiere, que ya describió Freud.
ResponderEliminarEl texto de Indalesio refleja bien esa sensibilidad y existencia
Si las cosas fueran sencillas no habría flores por primavera ni llantos al pormenor, esos que duelen de cansancio. ¿Quién le dio las pastillas a Pavese? ¿El desamor, la soledad o hacerse preguntas que no tienen respuesta?
ResponderEliminar(Segundo texto. Esta mañana envié otro que no guardé y algo hice mal porque no ha salido)
ResponderEliminarSi le añadimos rabieta permanente sí creo que puede acercarse a una expliacion. Indalesio da unas pinceladas del perfil y experiencia de vida de Cesare Pavese para ello. Decía Albert Camus que el destino para algunas personas lo veía como un monstruo mitológico que con su fuego arrasador iba aniquilando vidas inocentes. No sé si es totalmente aplicable a Césare Pavese. Lo que sí aparecen en su biografía son abundantes factores que hacen comprensible su melancolia y su final : Perdidas emocionales repetidas que dan origen a un duelo no resuelto , acumulativo, como experiencia- vivencia, que en una personalidad sensible dificilmente puede esquivar el desamparo existencial. Si los acontecimientos externo caen en tromba, una y mil veces, y si algunos de ellos llevan el dolor profundo del desamor como marca indeleble, la vida se convierte en un calvario, en un rosario de expectativas y decepciones insoportables, sin fin. Para seguir en la nada, arrojarse en sus brazos de una p... vez..
Por cierto Cande Gasbe, la misoginia , dícese que tiene su origen en esa sed insaciable de amor, de amor fusional, de diluirse en el objeto amoroso, imposible de satisfacer y que acaba profundizando la herida. Se busca la madre para hallar reiteradamente a la “ prostituta.” Para Freud y sus vastagos lacanianos es un tema princeps.
Bueno,¿pero hasta donde llegar? No existen diferencias en vuestras interpretaciones , me interesa Pavese por su escritura, por su armonía en la prosa, y por su clamor por la soledad. Sus experiencias con las mujeres no fueron muy satisfactoria, ¿pero hasta que punto influyo en su literatura? Que fuera misogeno, es un daño menor, además siempre continuo buscando la compresión de la mujer, hasta el último momento quiso y amó.
ResponderEliminarLleva razón Cande, tenemos muchos asuntos pendientes con las mujeres, y Freud no fue un referente para llegar a comprenderlo. Pero te ruego, no le llames misogino, solo que no despertó el amor de las mujeres y se sintió jodido por ello