INVERTIR EN SALUD

                         

No hay más ciego que el que no quiere ver. Estos días por motivos obvios aparece en la prensa escrita cantidad de artículos sobre la sanidad y el futuro que le espera, la mayoría coinciden, sería una locura modificar la sanidad pública, y es prioritario defenderla de los ataques de los depredadores que quieren esquilmarla.

Es lo que la historia nos enseña, la privatización lo que produce es empobrecimiento a costa de una mala salud para los ciudadanos. Hasta ahora y no después de mucho luchar, se ha conseguido que pasemos a una era más avanzada con la medicina basada en la evidencia, desbrozando la medicina perfecta o deseada y olvidando la medicina corrupta propias de los idiotas   (B. Feijoo)

¿Que hemos aprendido con la gestión de estos últimos años? que unos quieren desmontar el Sistema Público de Salud para sacar provecho exclusivamente personalizado, y otros dan palos de ciego porque no saben como practicar gobernanza en la Sanidad. ¿Existe un camino intermedio?, sin dudar.

1/ Impedir que la Gestión la realicen desde el ámbito privado. Defender a capa y con espada la Sanidad Pública, si se persiste en su defensa este bastión no caerá en manos corruptas. Todas las experiencias de la Gestión privada han supuesto un despilfarro económico y un retroceso en la salud de los ciudadanos.

2/ Participación y compromiso de los profesionales y población en la Gestión del uso y consumo sanitario. Racionalizando el consumo y uso, que hasta ahora siempre fue digno de todo encomio, pero sin más recortes.

3/ Inversión equilibrada en la investigación y desarrollo de nuevas vías clínicas que mejore las expectativas de mejor calidad de vida. Continuar con los planes de prevención y cuidados de los ciudadanos más débiles.

4/ Nuevos equipos de Gestión, mejor preparados y con compromiso tácito de aplicación de las medidas basadas en la evidencia y en la efectividad. Capacidad de gestionar la participación de los profesionales y los ciudadanos.

5/ Trabajo especifico en la seguridad y prevención de los pacientes para conseguir una disminución de efectos adversos, medicamentos innecesarios y pruebas clínicas de complacencia.

6/ Nuevas perspectivas en la Gestión de recursos  profesionales, estratificando la responsabilidad para conseguir la excelencia profesional. Retribuciones basadas en el compromiso de los profesionales con el uso de  la eficiencia.   

Y así podríamos continuar hasta conseguir un proyecto sensato y racional, que fuera útil para los ciudadanos y que despejara ese camino de obstáculos que pretende ponernos tanto la administración central, insensible a los logros sociales, como administraciones autonómicas obcecada en hacer una revolución descafeinada como alternativa a los conservadores, en la que no  creen ni ellos mismos.   

INDALESIO Enero 2013